Esta historia de Charles Dickens, debería encontrarse en las bibliotecas de todos los hogares. Es una lectura imprescindible para entender como fue la vida en Francia e Inglaterra durante la revolución francesa.
Sinopsis del libro
El Londres pacífico pero grotesco del rey Jorge III y el París clamoroso y ensangrentado de la Revolución Francesa son las dos ciudades sobre cuyo fondo se escribe esta inolvidable historia de intriga apasionante. Violentas escenas de masas, estallidos de hambre y venganza, espías y conspiradores, héroes fracasados y héroes a su pesar se mezclan en una trama artística y perfecta, llena de sorpresas y magistralmente elaborada por un Dickens en uno de sus mejores momentos creativos.
Opinión
Dickens nos plantea con esta historia una realidad paralela entre Francia e Inglaterra, mientras se está llevando a cabo la Revolución francesa.
Inglaterra juega el papel de la tranquilidad, el país que brinda un futuro prometedor y seguridad a sus habitantes, mientras que Francia atraviesa un momento oscuro, donde la violencia se hace cada vez más notoria a medida que el libro avanza.
La manera en que los personajes van hilando cada parte de la trama es magnifica y las historias en un principio aisladas empiezan a tomar sentido a medida que los capítulos avanzan.Para empezar tenemos a Lucy Manette, quien me parece un personaje esplendido con una historia sobrecogedora con su padre. Quienes mantienen una fuerte relación pese haber pasado infinidad de problemas. Esta parte de la trama se desarrolla en Londres, junto con las historias de los señores Carton y Darnay.
Si hablamos de los señores tenemos entonces un choque de personalidades. Para empezar tengo a Carton quien se llevó mi corazón por completo. Un hombre que no es consciente de su propio valor ni de la inmensidad de sus actos. Que ha vivido en las sombras sin recibir merito por sus hallazgos, los cuales debo mencionar fueron muchos. Manchados por la sombra de sus defectos en lugar de sus virtudes. Una vida triste y que para mí merecía más amor
Luego tenemos a Darney. Es un personaje que te engancha, consigue que te preocupes por él y lo sientas, pero nunca será de la misma manera que con Cartón. Con Darney, sentí que lo viví a través de Lucy y no por él mismo como personaje.
«Sin embargo, tengo la debilidad de querer que sepáis que habéis tenido poder para transformar de pronto un montón de ceniza en un fuego ardiente que, no obstante, participando de mi pobre carácter, no da calor ni luz y se consume sin provecho de nadie»
Finalmente llegamos al despliegue de la revolución que toma lugar en París. El autor ha hecho una belleza de esta recreación. Una pieza que te transporta a otra época, a otra piel y que te inunda de sentimientos.
A pesar de Dickens ser inglés, la forma en la que ha relatado Francia es preciosa. No escatimó en los detalles de un París triste y miserable que vivía al son de la guillotina.
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